Naturaleza muerta de María Blanchard

En Cantabria han nacido y vivido muchos personajes conocidos, algunos de especial relevancia. Hoy queremos recordar las hazañas de tres pioneros en el mundo de la pintura, de la aviación y el ciclismo. Todos ellos dejaron una impronta imborrable en la historia:

María Blanchard, la maestra del cubismo

María BlanchardLa santanderina es una de las figuras más relevantes de las vanguardias del siglo XX. Consiguió la Tercera Medalla de la Exposición Nacional de Bellas Artes, por lo que la Diputación de Santander le concedió una beca para seguir estudiando en París, una ciudad clave en su trayectoria. Se integró enseguida en la vida bohemia de Montparnasse, y llegó a exponer en el Salón de los Independientes de París.

Vivió con los artistas Angelina Beloff y Diego Rivera. También se relacionó con Juan Gris y Jacques Lipchitz, figuras clave del cubismo. De esta corriente ella misma se convertirá en una representante imprescindible, aunque fue relegada durante décadas al olvido por su condición de mujer y de pionera. Entre sus obras destacan las naturalezas muertas, pero tiene relevantes composiciones figurativas. Se considera «Las dos hermanas» una de sus piezas cumbre.

Sus pinturas son muy cotizadas en la actualidad. Están repartidas en galerías de todo el mundo, y algunas de ellas han alcanzado precios en Christie’s de cientos de miles de euros.

Salvador Hedilla, un pionero de la aviación

Salvador Hedilla

Piloto, instructor y mecánico, fue el primero en volar desde la Península a las Baleares. Su aventura comenzó cuando montó uno de los primeros talleres de automóviles en Buenos Aires.

Aunque parecía destinado a manejar coches de carreras, descubrió la aviación y su vida cambió al instante. Aprendió a pilotar, se sacó la licencia y se compró un avión. Desde entonces, no dejaría de volar hasta su muerte en un accidente durante un vuelo de instrucción.

Fue famoso por sus espectaculares exhibiciones, en las que hacía acrobacias con aviones construidos por él mismo. Además, fue el primero en colocar publicidad en ellos. Destacó por su habilidad y sangre fría en los vuelos de media y larga distancia. Así pudo hacer frente a los mil y un contratiempos que había que neutralizar para aterrizar a salvo con aquellas máquinas tan primitivas.

Vicente Trueba, la pulga de Torrelavega

Monumento a Vicente Trueba en La Cavada
Monumento a Vicente Trueba en La Cavada

El primer ciclista en ganar el Premio de Montaña del Tour de Francia fue este natural de Sierrapando, en el año 1933. Se forjó en las pruebas para aficionados que se celebraban en Cantabria en la década de los años 20.  Enseguida destacó por su talento como escalador incansable. En aquella época, los ciclistas tenían que hacer frente a las carreras, pero también a las averías y los imprevistos. De esta manera, acabar en un buen puesto en la clasificación era todo un logro.

Enseguida se le apodó «la pulga de Torrelavega», por su pequeño tamaño y facilidad para subir los más altos puertos de montaña. En esa edición del Tour, especialmente duro, fue uno de los solo cinco corredores que finalizaron todas las etapas en tiempo. De hecho, los que figuraban por delante de él en la general tuvieron que ser rescatados por la organización. De no haber sido así, habría sido el primer español en ganar la competición gala. Trueba se convirtió en todo un ídolo en España, si bien su carrera deportiva duró apenas dos años más.

Cabañas con Encanto es un proyecto de turismo rural comprometido con su entorno. Por eso, nos encanta conocer y transmitir a quienes nos visitan todo lo bueno que hay por estas tierras. Cantabria es una región llena de historia y con mucho, mucho encanto. ¿Te animas a visitarnos? Reserva ya tu cabaña rural y conoce las montañas en las que se curtió el mismísimo Vicente Trueba.

Comments are closed.