Detrás de una estancia en una auténtica cabaña de pastores pasiegos hay mucho trabajo, dedicación y, sobre todo, amor por los detalles. Para que te encuentres todo perfecto en tu escapada rural a Cantabria, el equipo de Cabañas con Encanto desempeña su labor con muchísimas ganas y cariño. Sin duda lo transmite Álvaro, responsable de rehabilitación y mantenimiento, en esta entrevista en la que nos cuenta como es su día a día en los valles y cuáles son sus tareas en este proyecto.
¿Cuál es tu papel en Cabañas con Encanto?
Llevo el equipo de rehabilitación y mantenimiento, estoy a cargo de que todo esté de la mejor manera para que la estancia sea lo más agradable posible.
¿Qué crees que aporta este proyecto al desarrollo sostenible de la zona?
Para mí es un proyecto apasionante. Creo que entre todos los de la zona aportando un poco y cuidando el entorno logramos que tanto el medio rural y natural no desaparezca. Desde que nació todo este proyecto familiar, lo que tenemos siempre presente es conservar y aprovechar todo lo que hay, desde una piedra hasta un trozo de madera de roble. Creemos que ahí reside buena parte del encanto de todas las cabañas y de su entorno.
¿Cómo te imaginas el futuro de Cabañas con Encanto?
Me lo quiero seguir imaginando como está, sin grandes cambios. Muchas veces, cuanto más se toca lo que hay, más se estropea, y se puede llegar a perder su esencia. Las personas de fuera quieren ver lo que había en estos valles, conocer el pasado. La gente quiere salir de su ciudad y conocer la zona tal y como es ahora, que es muy parecido a como era muchas décadas atrás.
¿En qué crees que reside el encanto de Cabañas?
Reside en el empeño por conservar la esencia de cada cabaña, aprovechar todo y que su rehabilitación sea lo más parecido a cómo nos la encontramos, pura piedra y madera. Uno de los encantos es el ventanal con las vistas a la montaña. Otro, y muy importante, es la decoración, que hace que desde el primer momento te sientas en un lugar único. Y, sobre todo, el equipo humano, que es todo compromiso, amor e ilusión por Cabañas.
¿A que cabaña tienes especial cariño?
Buena y difícil pregunta. Empezamos en el 2007 con unas ganas locas de venir los fines de semana en familia y ayudar en la primera, que fue la Ancosa. ¡Qué buenos recuerdos! A día de hoy he tenido la suerte de participar en la rehabilitación de todas las demás, por eso me es difícil elegir. Ancosa es «casa», pero también tengo mucho cariño a Brena. La rehabilitamos en pandemia y eso marca, la verdad. Buquera es de mis preferidas de las pequeñas. ¡Es muy difícil la pregunta!
Con el entusiasmo que transmite Álvaro, ¿no entran ganas de planificar ya una escapada rural a Cabañas con Encanto? Reserva online y descubre tú mismo/a en dónde reside el encanto de nuestras cabañas.