Paisajes, historia y gastronomía. Cantabria reúne en pocos kilómetros cuadrados un sinfín de posibilidades para quienes disfrutan de viajar en invierno. Y, como en Cabañas con Encanto ya estamos planificando el nuevo curso, te proponemos planes para que te animes a visitarnos en los meses más fríos.

Las ventajas de viajar a Cantabria en invierno

No es ningún secreto: los veranos cada vez son más sinónimo de masificación o, al menos de «todo completo». Este año en la zona norte de la península hemos recibido a montones de personas con ganas de huir del calor y dormir tapadas por la noche. No hay mejor sitio para hacerlo que los valles pasiegos y aledaños, desde luego. Por eso en invierno las ventajas se multiplican: hay muchísimos menos turistas, por lo que disfrutarás con toda la tranquilidad de los lugares más frecuentados, como Santander, Santillana del Mar o las cuevas de Altamira.

Pero, además, encontrarás precios más bajos, tanto en el transporte como en el alojamiento y la actividades.

Actividades para disfrutar de Cantabria en invierno

Estas tierras lo tienen todo: deportes de invierno, rutas de senderismo, aves migratorias, lugares históricos… Anota unas cuantas ideas:

  • Esquí y snowboard: en Cantabria podrás acercarte a sus dos estaciones de esquí, Alto Campoo y Fuentes de Invierno. Ambas ofrecen pistas para todos los niveles.
  • Senderismo con raquetas de nieve: Cantabria tiene una espectacular red de senderos que son ideales para divertirse con las raquetas de nieve. Sin duda, una forma original y muy entretenida de disfrutar de la naturaleza invernal. Pregúntanos, en Cabañas con Encanto ofrecemos esta actividad.
  • Observación de aves migratorias: ¿sabías que, según SEO-Birdlife, tenemos censadas 30.000 aves de 69 especies diferentes? No es de extrañar que la comunidad sea un destino popular para la observación de aves, especialmente en invierno.
  • Visita a ciudades y pueblos históricos: la historia cántabra se remonta a muchos siglos atrás, como bien apuntan los yacimientos prehistóricos y las cuevas que abundan por la zona. En Cantabria podrás recorrer enclaves históricos de mucho interés, pueblitos llenos de encanto y rincones mágicos. Potes, San Vicente de la Barquera, Santillana del Mar, Comillas, Castro Urdiales… son solo algunos de estos sitios que tienes que ver. Y, en los valles pasiegos, no dejes de visitar Liérganes, Villacarriedo o Selaya.
  • Gastronomía local: ¿qué podemos decirte de una tierra de contundentes platos de cuchara, perfectos para el invierno? Nada mejor que rematar un cocido montañés o un cocido lebaniego con una quesada recién hecha.

Algunos consejos para viajar a Cantabria en invierno

Buena parte del encanto de Cantabria y de lugares como los valles pasiegos es consecuencia de su orografía. La montaña es la protagonista, con un clima duro, de inviernos largos, húmedos y fríos. Por eso, no te confíes y anota:

  • Lleva la ropa adecuada. Esto implica ropa y calzado de bastante abrigo, que también sea impermeable y que transpire.
  • Consulta con frecuencia el pronóstico del tiempo. El clima cántabro puede cambiar rápidamente, por eso te recomendamos que consultes qué tiempo va a hacer en las siguientes horas para elegir el plan más adecuado.
  • Muévete en coche. El transporte público en Cantabria puede ser limitado en invierno. Te recomendamos que vengas en coche o que consigas uno de alquiler para explorar a tu ritmo.

Como ves, viajar a Cantabria en invierno no es un buen plan, ¡es un planazo! Reserva ya tu auténtica cabaña pasiega para disfrutar de noches mágicas frente a la chimenea y conocer las maravillas de la región.

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